La denuncia de los padres de dos gemelas de 10 años que han sufrido bullying en tres colegios distintos: "Salen llorando"

Publicado el 23 de mayo de 2024, 16:17

Los padres de dos gemelas de 10 años denuncian que sus hijas han sufrido bullying en tres colegios de la Comunidad de Madrid

El supuesto acosador de las niñas se cambió al mismo centro educativo que las gemelas donde continuó el acoso escolar

"Un niño le dio a una de las niñas un puñetazo y una bofetada", denuncia el padre de las dos gemelas de 10 años

Santa Egido y José Manuel Cariñena son los padres de dos niñas gemelas de 10 años que han denunciado al periódico 'La Vanguardia' la situación de indefensión que viven sus dos hijas pequeñas por culpa del bullying y del acoso escolar que han sufrido en nada más y nada menos que tres centros escolares distintos.

Según el testimonio que han ofrecido estos dos padres al medio de comunicación, sus dos hijas con solo 10 años han tenido que cambiar hasta en tres ocasiones de colegio debido a las situaciones insostenibles de acoso escolar que han sufrido por parte de sus compañeros. Las hermanas han estado estudiando entres centros escolares de la Comunidad de Madrid situados en los municipios de: Carabaña, Valdilecha y Perales de Tajuña. En estos tres colegios, estas pequeñas han sufrido el ataque y el acoso de sus compañeros.

Los dos primeros episodios de acoso escolar que sufrieron sus hijas

 

Todo comenzó en 2018 cuando las niñas estaban matriculadas en un centro educativo de Carabaña. Tras cuatro años de acoso, en 2022 los padres de las gemelas decidieron cambiar de centro educativo a sus hijas y matricularlas en un colegio de Valdilecha.

 

Para su sorpresa, el alumno que las acosaba también cambió de centro y se matriculó en el mismo colegio en el que se habían inscrito las hermanas. Motivo por el que el acoso escolar y el bullying continuó. Al enterarse de que el acosar de sus hijas se había cambiado al mismo centro escolar, los padres de las gemelas solicitaron "las actas al director del primer colegio y al decirnos que no las tenía denunciamos en la Guardia Civil a él y al colegio de forma retroactiva por inacción”, denuncian a 'La Vanguardia'. 

 

Según el padre de las pequeñas, el objetivo suyo y el de su mujer era ”demostrar en el segundo colegio lo sucedido en el anterior". Viendo que era imposible evitar el contacto entre el acosador y sus hijas, esta pareja decidió cambiar de colegio a las pequeñas y matricularles en un colegio a 14 kilómetros de su domicilio.

 

Sufren bullying en su nuevo centro escolar

 

En este colegio de Perales de Tajuña las dos hermanas han tenido que volver a sufrir la misma pesadilla: otro compañero les acosa. "Resulta que un niño le dio a una de las niñas un puñetazo y una bofetada, el pasado mes de noviembre, y le insulta muchos días”, explica la madre a 'la Vanguardia'.

 

 

Al parecer, los insultos no cesan y, por eso, las niñas abandonan muchos días el colegio "llorando“. Santa Egido ,madre de las niñas, denuncia que desde el actual centro escolar en el que están matriculadas sus hijas se ha optado por evitar el contacto entre el supuesto agresor y sus hijas.

 

"La niña se tiene que alejar del grupo de amigos cuando el niño que la pegó se acerca porque se ha establecido una orden de alejamiento", explica la mujer. Analizando la medida, la madre de las víctimas denuncia que “el mundo al revés. Es la afectada la que debe retirarse”.

 

La denuncia de los padres y la versión del colegio y de Consejería de Educación

 

Desde 'La Vanguardia' se han puesto en contacto con la dirección de este colegio público de Perales de Tajuña. Sin embargo, el centro escolar se niega a ofrecer ningún tipo de explicación sobre este caso: “Estamos trabajando mucho estos temas”.

 

 

"Por su parte, la Consejería de Educación, tras ser preguntada por' La Vanguardia'admite que se han abierto dos investigaciones. De hecho, la consejería ha respondido en un documento escrito que 'el pasado mes de marzo el centro abrió un protocolo de acoso con respecto a este caso. Tras la investigación de la Inspección Educativa se determinó que los incidentes no correspondían a una situación de acoso. No obstante, se consideró necesario proponer acciones de resolución de conflictos, así como efectuar acciones de seguimiento mediante la observación de la alumna'", recogen desde el medio de comunicación. 

 

No obstante, los padres de las dos víctimas apuntan a que denunciaron el acoso escolar que habían sufrido sus hijas ante las dependencias de la Guardia Civil: “Al cabo de unos meses nos llegó una carta del juzgado de que la denuncia no tenía más recorrido, salvo que fuésemos a un tribunal superior con más pruebas. Vamos, que fue sobreseído”.

 

Por eso, esta pareja ha optado por ir por la vía de la Inspección en los acosos producidos en los dos últimos colegios. “El inspector de la zona sí que se interesa por el caso”, reconoce a 'La Vanguardia' el padre de las gemelas.

 

Sin embargo, el progenitor considera que el colegio de Perales de Tajuña cerró el caso sin tomar declaraciones a los testigos y considerándolo como una falta leve.