Una compañía acaba de lograr algo que parecía imposible: conectar un dispositivo Bluetooth con un satélite

Publicado el 15 de mayo de 2024, 20:28

Los satélites de Hubble Network orbitan a unos 600 kilómetros de la superficie terrestre

Los accesorios Bluetooth que nos rodean, como teclados, mandos de videojuegos o auriculares, tienen un alcance limitado a unos pocos metros. Si nos alejamos demasiado, el vínculo inalámbrico empieza a dar problemas hasta desconectarse. Pese a esta realidad, una startup ha conseguido algo que parecía técnicamente imposible: establecer una conexión Bluetooth entre la superficie de nuestro planeta y el espacio.

 

Hubble Network ha anunciado que sus satélites en órbita han recibido exitosamente señales de un chip Bluetooth incorporado en un dispositivo terrestre. La firma asegura que se trata del primer gran paso para desarrollar un sistema de conectividad global de bajo consumo y económico de operar que sea útil para diversas actividades. Desde la logística hasta la monitorización de la temperatura del suelo.

Una conexión Bluetooth a 600 km de distancia

La startup, que ha sido respaldada por una ronda de financiación Seria A de 20 millones de dólares, lanzó sus dos primeros satélites a bordo de un cohete Falcon 9 de SpaceX en su misión compartida Transporter-10. Ambos equipos, que orbitan a una distancia de unos 600 km de la superficie, han conseguido comunicarse con al menos un chip Bluetooth terrestre gracias a lo que consideran un sistema innovador.

 

Como sabemos, el alcance de Bluetooth está determinado por una amplia variedad de factores técnicos, entre los que encontramos el espectro radioeléctrico, la sensibilidad del receptor, la potencia de transmisión y la ganancia de la antena. Hubble Network equipó a sus satélites con antenas de matriz de fase que funcionan como un pequeño lente con aumento que permite la conexión con el chip en Tierra.

 

Si bien la tecnología se encuentra en fase experimental, desde la firma no duda en poner sobre la mesa varios ejemplos de uso. En primer lugar, señalan que no es necesario contar con chips Bluetooth especiales y que una actualización de firmware en los equipos existentes es suficiente para permitir la conexión con sus satélites. Así que se ven conectando equipos de las industrias de la energía, la agricultura y el transporte.

La hoja de ruta actual incluye el lanzamiento de 34 satélites más. Uno se lanzará con la misión Transporter-11 de SpaceX este verano y otro con la misión Transporter-13 más tarde. El resto de los satélites serán enviados entre el cuarto trimestre de 2025 y principios de 2025, aunque la compañía todavía no ha contratado estos últimos lanzamientos. Toca esperar para saber cómo evolucionará este interesante proyecto.